martes, 31 de marzo de 2020

ESPINELAS DEL CONFINADO


En esta noche oscura,
recogido y confinado
por este virus malvado
que no sé si tiene cura,
ni vacunas con locura,
me dirijo con afecto,
sorprendido y circunspecto
al amigo y al vecino,
sin temor a ser cansino,
e intentando ser correcto.

Esta guerra la ganamos
por las buenas o las malas,
sin cohetes ni bengalas,
porque en casa nos quedamos.
Sin quererlo nos buscamos
y bailamos nuestra canción
al calor de un corazón
que no mata ni se muere,
al calor de quien te quiere,
y al cobijo de un buen sillón.

©

lunes, 30 de marzo de 2020

EL CINE DEL CONFINADO


James Stewart con ventana indiscreta,
Rita Hayworth me regala sus guantes,
Audrey Hepburn regresa con carpeta,
las musas desayunan con diamantes.

El recluta patoso y su chaqueta
confinado en rima consonante.
Una triste balada de trompeta,
Rock Hudson cada vez es más Gigante.

Mientras Hitchcok desata la psicosis
me siento un centauro del desierto.
El cine es el drama de la hipnosis,

de una despedida en aeropuerto.
Si en este sueño procuras mi dosis
yo en tu coartada me convierto.
©

viernes, 27 de marzo de 2020

CÓNCAVO Y CONVEXO CONFINADOS


El cóncavo convexo de tus manos,
el látex de caricia al corazón,
el roce de tus labios tan lejanos,
la nota discordante en mi canción.

Tu cuerpo tan hermoso, tan liviano,
tu boca en mascarilla de pasión,
tus piernas que dibujan lo mundano,
tus ojos que desvían mi atención.

Tus brazos son las alas que me atrapan
en sábanas que siembran el pecado.
Mis pies ya no corren ni se escapan

al triste deseo enamorado.
Tú sabes qué intenciones destapan
a aquellos que juegan con lo vedado.