y en la mano una buena cacerola,
que haga juego con la banderola,
raya a un lado con gomina y fleco.
Cruzando nuestro “Núñez de Balboa”,
como cantaba el maestro Javier,
Borja Mari, se compra el bachiller,
un yate, un “Cara al sol” y unas anchoas.
Qué sorpresa que reclamen libertad
del barrio Salamanca a las Rozas,
sin vergüenza, sin misa y sin piedad,
con sus palos de golf y sus carrozas,
mostrando el desprecio a la sanidad
y el odio que en su saña nos destroza.
©
Qué horror!!
ResponderEliminarIrresponsabilidad, egoismo y odio en su máxima expresión, querida compañera. Pero el tiempo juzgará...
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