domingo, 25 de marzo de 2018

MÁTER ESPAÑA



MATER ESPAÑA. HIMNO.- (Por Cecilio Aguilera)

Algunos acontecimientos recientes han reactivado el debate sobre el himno de España y su letra. Y en algunos medios de comunicación ha resurgido el viejo tópico, de que los cantautores, supuestamente escorados hacia la izquierda, no pueden poner la palabra España en sus canciones, al contrario del pasodoble popularizado por Manolo Escobar, Viva España, que  paradójicamente fue compuesto por unos belgas.

Este asunto me hizo recordar algunas grandes canciones que contienen la palabra España en su interior y que son auténticos himnos de amor, con algo de crítica, hacia nuestro país.

La primera que recuerdo es Mi querida España de Cecilia; donde habla de las heridas de la Guerra Civil y de la nueva esperanza.

También recuerdo España huele a pueblo, del sevillano Benito Moreno, que homenajea el trabajo y la honradez del mundo rural tan presente en aquellos años 70.  Es un pasodoble y también la grabó Manolo Escobar.

Y por supuesto la celebérrima España camisa blanca, que compuso Víctor Manuel para el repertorio de Ana Belén, basándose en unos versos del poeta bilbaíno Blas de  Otero, un himno de amor a nuestro país con gran altura poética, que contó con muchas versiones.

Pero como dijo Benjamín Prado, “De cualquier tema que hablemos ha escrito Joaquín Sabina una canción”. En esto de himnos a España también tiene su aportación. MATER ESPAÑA, que salió en su disco de 2005 Alivio del luto. Como las anteriores es una historia de amor a su país mostrando lo bonito y lo feo, con gran altura poética. Musicalmente es una balada de un ritmo reggae lento, con unos arreglos muy sencillos. Está firmada a medias con el cantautor italiano Francesco di Gregori, porque se basó en una canción suya para la música.

Como canción, no tuvo la entidad suficiente para defenderla en directo, pero forma parte de sus recitales de poesía, y se convierte en uno de los momentos álgidos ya que no la recita sino que la canta a cappella,  con una emoción que se le nota en los ojos con lágrimas, dándole la categoría de himno.

Y ahora os dejo con mi amigo, el poeta Joaquín Palomar, para que os hable de la letra.



Cecilio Aguilera Nieto.

Máter España
de barba peregrina,
que falta a misa de doce,
que no conoce rutina,
masona, judía, cristiana,
pagana y moruna.
Máter España,
más guapa que ninguna.

Madrastra España
a la hora de la siesta,
la puta que se enamora,
la fruta que se indigesta,
que al filo de la cucaña
mira pa otro lado.
bendita España
de Azañas y Machados.

Cómplice España
tormento redentor,
Perejil, Ceuta y Melilla,
cotos de caza menor,
catalán, galego, euskera,
lacandón, Castilla,
tópica España,
fibra óptica y ladillas.

Huérfana España
raíces y cimientos,
epidemias, cicatrices,
blasfemias y sacramentos,
¿por quién doblan las campanas?
San Fermín en vena,
la de Triana
contra la Macarena.

Judas España
del mus y del café,
Al Andalus, Malasaña,
gitanito aserejé,
la del mono azul cobalto
y el caballo verde,
guardia de asalto
que ladra pero muerde.

Chusco y legaá
de todas o ninguno,
tricolor bandera blanca,
Millán Astray, Unamuno,
cervantina cojitranca
de áspero pasado
¿Quién me ha robado
el siglo veintiuno?

Máter España…

Por Joaquín Palomar:




La canción italiana de Francesco De Gregori en la cual se basó el maestro para realizar “Máter España” es “Viva L’Italia”. Como reconoció en alguna entrevista, en este país es muy difícil dedicarle una canción a España, y llamarla “Viva España”, “salvo que te llames Manolo Escobar”. Incluso en algún momento se le pasó por la cabeza denominarla “arriba España”.
Sabina recorre metafóricamente nuestra idiosincrasia y exponiendo de manera peculiar las características de nuestro país. Comienza retratando los variados sentimientos religiosos a lo largo de nuestra historia: el camino de Santiago, misa de doce, masona, judía, cristiana, pagana y moruna. Y remata la primera estrofa con un sencillo y certero piropo dándole el título a la canción.
Podemos decir con convicción que existen varias características y típicas que diferencian nuestra patria ante las demás. La siesta, sin duda, sería una de ellas. La hora de la siesta, algo muy español, como también “mirar pa otro lado, al filo de la cucaña”. Quedarse a un paso de conseguir los objetivos y buscar la excusa adecuada acusando al infortunio.
 La puta que se enamora…”: En una entrevista en El País indicó que puta en la canción no lo expresaba de manera peyorativa. Aún mas, exponía que dentro del mismo disco, “Alivio de Luto” le dedicaba un tema a Rocío (una de sus hijas), y que cariñosamente la llamaba “hija de puta”, siendo una canción de amor.
Termina esa estrofa nombrando e incluyendo ilustres nombres propios de la historia de nuestro país... por ejemplo Azaña y Machado.
En la entrevista que he hecho referencia anteriormente, reconocía también que este tema era un canto de amor a España, pero “a una España republicana, ilustrada.
El recorrido continúa retratando la variedad cultural y lingüística;  geográficamente nos recuerda el famoso capítulo de la Isla Perejil, dos ciudades tan autónomas como olvidadas, Ceuta y Melilla. El tormento redentor de nuestras situaciones políticas diarias y cuestiones sin resolver alimentan cada vez más el tópico de nuestra nación.
Fibra óptica y ladillas”… No se puede reflejar con más maestría nuestro presente. En un mundo lleno de avances tecnológicos a ritmos vertiginosos, llama la atención que en ciertos aspectos sigamos estancados en el pasado para la mayoría de las cosas. Sin duda, como él mismo decía “ahí andamos, mas en las ladillas que en la fibra”.
Huérfana España, raíces y cimientos, epidemias, cicatrices, blasfemias y sacramentos”… Nos muestra un pasado sombrío de guerra y sin sentido. No se trata de levantar viejas heridas; sí de recordar la historia y aprender de ella. “¿Por quién doblan las campanas?... Evidencia la novela del reconocido autor Ernest Hemingway que desarrolla su trama en España, durante la guerra civil. “La de Triana contra la Macarena”… como metáfora de la rivalidad entre hermanos.
el mus y el café” “la del mono azul cobalto y el caballo verde, guardia de asalto que ladra pero muerde”. Hace mención a la Guardia Civil, y su pasado algo oscuro que en su tiempo tantos problemas provocaron.  Afortunadamente algo ha cambiado. A él siempre le llamó la atención el veneradísimo respeto que se le ha dedicado siempre a dicha institución. Aquí le hace una pequeña crítica, para incluirla como algo muy nuestro, tópico y diferenciador del resto de países.
Siguiendo con los nombres propios, y ya acabando, aparecen dos personajes tan antagónicos y opuestos como son Millán Astray y Miguel de Unamuno. Precisamente fue un 12 de Octubre en un acto conmemorativo donde los dos estaban presentes y desataron una discusión que aun siendo anecdótica, forma parte de nuestra curiosa  historia. Se la resumo en algunas frases:
-Millán Astray : ¡ESPAÑA!….. gritaba, a lo que el público respondía: “¡UNA!
Continuaba: ¡ESPAÑA!... ¡GRANDE!, le contestaban. ¡ESPAÑA!... volvía a vocear a pecho descubierto… ¡LIBRE!
Don Miguel se levantó nervioso y comenzó un maravilloso discurso:
“[...] sabéis que soy incapaz de permanecer en silencio. A veces, quedarse callado equivale a mentir, porque el silencio puede ser interpretado como aquiescencia. Quiero hacer algunos comentarios al discurso -por llamarlo de algún modo- del profesor Maldonado, que se encuentra entre nosotros. Se ha hablado aquí de guerra internacional en defensa de la civilización cristiana; yo mismo lo hice otras veces. Pero no, la nuestra es sólo una guerra incivil. Vencer no es convencer, y hay que convencer, sobre todo, y no puede convencer el odio que no deja lugar para la compasión. Dejaré de lado la ofensa personal que supone su repentina explosión contra vascos y catalanes llamándolos anti-España; pues bien, con la misma razón pueden ellos decir lo mismo. El señor obispo lo quiera o no lo quiera, es catalán, nacido en Barcelona, y aquí está para enseñar la doctrina cristiana que no queréis conocer. Yo mismo, como sabéis, nací en Bilbao y llevo toda mi vida enseñando la lengua española...” 
Millan Astray replicó: ¡MUERA LA INTELIGENCIA, VIVA LA MUERTE!
A lo que Unamuno contestó: Venceréis, porque tenéis sobrada fuerza bruta. Pero no convenceréis, porque para convencer hay que persuadir.
Lo dicho; el mejor ejemplo de “malditas ladillas” que seguimos arrastrando, pero que debemos evitar, al menos en nuestro presente y futuro.

“MATER ESPAÑA” fue dedicada al Colectivo Peor para el Sol en el concierto de Granada el 7 de marzo de 2.015.
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